Medicina Moderna

Se que hoy no es un día con una connotación especial para el mundo pero para mi lo es. Hoy fui al médico por enésima vez y adivinen, se acabaron las pastillas locas!!!

Se que no saben a lo que me refiero pero ahora les explico. Hace dos meses fui al médico para que me recete algo para los cólicos tan fuertes que tenía y como nunca, me atinaron, (casi nunca lo logran, me siento mal y según ellos estoy perfecta) porque me enviaron unos exámenes para saber si todo iba bien con mis hormonas y bam! ese era el problema, estaba produciendo demasiada prolactina. Debido a esto me enviaron unas pastillas, (grifocriptina), pequeñitas para regular el asunto.

Supuse que eso iba a solucionar mi problema y lo hizo pero esa bendita pastilla no solo hizo eso, sino que también hizo de mi vida un infierno total desde el primer día que la tomé. Primero el mareo matutino, era horrible, no podía pararme y tenía que tirarme al suelo para evitar la fatal caída.

Luego en mi vida se puso de acuerdo con mi médico porque, además de sentirme mal todo al mi alrededor se caía a pedazos. Me rompieron el corazón y en vez de tomarlo de buena forma me deprimí como una tonta, y por esa razón lo único que se me venía a la mente era matar a todo ser viviente en el planeta u otras veces, pegarme un tiro para dejar de sufrir. Además, no paraba de cambiar de estado de ánimo, me alegraba y lloraba en menos de cinco minutos por nada. Según yo el mundo se había vuelto en contra mía y yo no podía más que observar, llorar y reír.

Hoy, fui al doctor nuevamente y me encontré con dos sorpresas. La primera que la doctora que me recetó la diabólica pastilla ya no trabajaba ahí (incompetente quizá???, nunca lo sabré) y segunda, que esa medicina ya no se usa para tratar ese tipo de dolencias. La verdad no me sorprendí, con mi suerte, esa medicina estaba destinada para mi. A la final, el doctor me dijo que suspenda el tratamiento.

Como farmacéutica que soy, me sorprende el poder que puede tener algo tan pequeño en un organismo como el nuestro, y no solo fisiológicamente, sino anímica y espiritualmente. Por eso les digo, y ahora si con experiencia, NUNCA TOMEN NADA SIN ANTES AVERIGUAR BIEN QUE ES, PARA QUE, Y SI LES HACE MAL, NO LO TOMEN.

Ahora tengo que retomar mi ánimo normal, y volver a redescubrir quien era, con mi carácter complicado y todo pero mío al fin, no producto de una mala receta.

Nymphadora

P.D: Gracias a todos los que me soportaron estos dos meses, y en especial a ti Andre, siento mucho haberme desahogado contigo, en verdad lo siento.