Generalmente los finales son bastante tristes, pero este final no lo fue, este final fue bastante inesperado.
Pensé que hace ya dos años había sido el final, yo fui la que decidió eso, aquel fatídico día en el que un muro que alzamos nosotros mismos nos separó, pero ninguno de los dos puso una puerta y mientras vivíamos nuestras vidas separadas el muro seguía ahí, y a pesar de él nos comunicábamos, irónico ¿verdad?
No hace mucho el muro cayó, o talvez desapareció, la verdad su final fue desconocido, a mi no me importó. El punto es que nos pudimos ver nuevamente, frente a frente. Cualquiera pensaría que sin el muro podríamos vivir juntos, compartiendo, soñando, pero no, era el muro el que nos mantenía unidos y ahora que se ha ido “eso” que teníamos se ha ido.
Hace no mucho me pidió algo que no debía pedirme, con la ilusión en la mano le pedí un tiempo, pero luego con su capacidad increíble de huir me evadió, y al final no hubo peleas, no hubo una conversación, no hubo ni siquiera una llamada de teléfono, simplemente un mail, en el que me decía que no sabe lo que quiere. En mi experiencia se que la mayoría de personas no lo sabe, yo no lo se, aunque trato de saberlo.
Que final, ¿no lo creen? No fue triste, no fue dramático, ni siquiera sorpresivo, fue bastante vacío, formal, como si todo esto fuera nada más que un asunto de negocios.
¿Fue acaso eso?
Es ahí cuando pienso que esa situación podría considerarse triste, la situación, porque yo no me siento triste, ¿qué más podría hacer para lastimarme? Yo creo que él ha hecho de todo, ya no le quedaba nada, así que con esa carta la verdad no me rompió el corazón, no causó nada en mi, algo de risa, nada más, no puedo todavía creer el increíble tamaño de tu inmadurez.
Es irónico como las personas a las que más quieres son aquellas que más te lastiman.
Algo vacía, pero suya…
Nymphadora
Pensé que hace ya dos años había sido el final, yo fui la que decidió eso, aquel fatídico día en el que un muro que alzamos nosotros mismos nos separó, pero ninguno de los dos puso una puerta y mientras vivíamos nuestras vidas separadas el muro seguía ahí, y a pesar de él nos comunicábamos, irónico ¿verdad?
No hace mucho el muro cayó, o talvez desapareció, la verdad su final fue desconocido, a mi no me importó. El punto es que nos pudimos ver nuevamente, frente a frente. Cualquiera pensaría que sin el muro podríamos vivir juntos, compartiendo, soñando, pero no, era el muro el que nos mantenía unidos y ahora que se ha ido “eso” que teníamos se ha ido.
Hace no mucho me pidió algo que no debía pedirme, con la ilusión en la mano le pedí un tiempo, pero luego con su capacidad increíble de huir me evadió, y al final no hubo peleas, no hubo una conversación, no hubo ni siquiera una llamada de teléfono, simplemente un mail, en el que me decía que no sabe lo que quiere. En mi experiencia se que la mayoría de personas no lo sabe, yo no lo se, aunque trato de saberlo.
Que final, ¿no lo creen? No fue triste, no fue dramático, ni siquiera sorpresivo, fue bastante vacío, formal, como si todo esto fuera nada más que un asunto de negocios.
¿Fue acaso eso?
Es ahí cuando pienso que esa situación podría considerarse triste, la situación, porque yo no me siento triste, ¿qué más podría hacer para lastimarme? Yo creo que él ha hecho de todo, ya no le quedaba nada, así que con esa carta la verdad no me rompió el corazón, no causó nada en mi, algo de risa, nada más, no puedo todavía creer el increíble tamaño de tu inmadurez.
Es irónico como las personas a las que más quieres son aquellas que más te lastiman.
Algo vacía, pero suya…
Nymphadora
P.D: Foto de espaldas del susodicho en la biblioteca de la facultad...de que sirve decirte adiós.
3 comentarios:
Una nunca sabe lo que tiene hasta que lo pierde, cada persona tiene que afrontar los problemas de alguna manera y como lo haga te dice con quien estas tratando, eres una persona de valor incuantificable muy especial!
No te molestes en ponerte triste por alguien que no tiene la mas minima idea de con quien estuvo tqm
Es tiempo de surgir.
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